martes, 18 de diciembre de 2012

Controlar los imprevistos y la duración de una reforma: Planificación previa


Publicado por: Plan Reforma
Controlar los imprevistos de una reforma (y en realidad, de cualquier tipo de obra) es en realidad sencillo: Planificación. La mayor parte de la gente que ha hecho una reforma en su hogar se queja de dos cosas fundamentalmente: el presupuesto subió más de lo esperado y las obras duraron más de lo estipulado.
Cuando empezamos unas obras lo hacemos con la ilusión de cambiar por completo un piso o bien construir un nuevo hogar, una nueva casa. Las prisas por empezar responden a las ganas de ver las obras terminadas. Siempre se ha dicho que las prisas no son buenas compañeras, pues bien en este caso, tampoco.
Hay que intentar no ser impacientes y dedicar mucho tiempo al proyecto, es decir, a decidir exactamente qué hacer en tu piso, cómo lo vas a querer, colores, materiales, sanitarios, todo, hasta el último detalle como la escobilla del baño. Pongamos que decidimos dedicar 2 o 3 meses a esto. ¿Es una pérdida de tiempo? ¿Os da la sensación que las obras terminarán más tarde? La respuesta es no, lo más probable es que terminen en la misma fecha que si hubiéramos empezado de prisa y corriendo. ¿Por qué? 
Aquí tenéis un ejemplo de planificación de una reforma media, donde se tiene que hacer derribos, cambiar un poco la distribución, cambiar algunas instalaciones, poner muebles de cocina, alicatar, poner parquet y pintar.
La planificación permite al Coordinador de las obras, el arquitecto o decorador, hacer todos los pedidos antes de empezar las obras. Permite que cada industrial se organice para empezar cuando se estipule; permite, por tanto, que la duración de las obras sea menor y al mismo tiempo, al haber definido todas las calidades previamente, que el presupuesto inicial no se dispare.
Si dedicamos 2 o 3 meses a planificar, nuestras obras durarán 3 meses. si decidimos invertir 1 mes, nuestras obras durarán 5 meses. En los casos en que es necesario mudarse durante las obras, nos ahorraríamos nada más y nada menos que dos meses de alquiler.
Así que el consejo de hoy es: ¡Sed pacientes y planificad!